Iroel Sánchez
«Para triunfar tenemos que afrontar el mundo tal y como es… Las cargas de este joven siglo no pueden caer solo sobre las espaldas de Estados Unidos», se lee en la nueva Estrategia de Seguridad Nacional enviada al congreso por el presidente Barack Obama el pasado 26 de mayo. “Nuestro enemigo no es el terrorismo porque el terrorismo es una táctica», ha dicho el asesor presidencial sobre seguridad y contraterrorismo John Brennan, y con ese cargo, en ese país, de terrorismo algo debe saber.
Luego de estas palabras, que contienen hasta un cierto halo de humildad, los creyentes en la política del Cambio tenían derecho a esperar que se descontinuara la práctica de hacer listas para calificar –o más bien descalificar- países en el más puro estilo imperial. Pero no, aquí estamos otra vez ante la bifurcación entre las palabras y los hechos que tanto gusta a los críticos de las administraciones del Partido Demócrata.