Sucedió y no fue por los planes de asesinato fraguados en la CIA, ni tampoco por las consecuencias de la desaparición de la URSS ni por el efecto de los más de 50 millones dólares anuales destinados al «cambio de régimen» en Cuba y que durante la administración Obama alcanzaron sus cifras récord: Hay un nuevo Presidente en Cuba, nació después de 1959 y se llama Miguel Díaz Canel Bermúdez. Sigue leyendo