Las cuentas en Twitter pueden ser reveladoras. Si un siquiatra analizara la cuenta en Twitter del Senador Marco Rubio, o la del Presidente Donald Trump, en los últimos días, tal vez encontraría material interesante. Un profesional competente, por supuesto, no como aquellos que motivados por el mismo Senador cubanoamericano han quedado en rídiculo al atribuir daños a la salud de diplomáticos en La Habana a sofisticadas armas rusas que luego el mundo entero ha sabido eran grillos caribeños. Sigue leyendo