Iroel Sánchez
Amaury es un amigo de mi mamá que ya rebasa los ochenta años. Sabiendo que almuerzo con ella los domingos, Amaury me llamó para hacerme un comentario-pregunta.
Amaury es un amigo de mi mamá que ya rebasa los ochenta años. Sabiendo que almuerzo con ella los domingos, Amaury me llamó para hacerme un comentario-pregunta.
“–Perdonen la presidencia y la distinguida concurrencia que aquí se halla –exclamó serenamente el muchacho flaco y rubio, llamado Rubén Martínez Villena— que un grupo de jóvenes cubanos, amantes de esta noble fiesta de la intelectualidad, y que hemos concurrido a ella atraídos por los prestigios de la noble escritora a quien se ofrenda este acto, perdonen todos que nos retiremos. En este acto interviene el Doctor Erasmo Regüeiferos, que olvidando su pasado y actuación, sin advertir el grave daño que causaría su gesto, ha firmado un decreto ilícito que encubre un negocio repelente y torpe, digno no de esta rectificación y de reajuste moral, sino de aquel primer año de zayismo.”