Ángel Guerra Cabrera
La nueva ley de inversión extranjera en Cuba no entregará al capital foráneo la propiedad de un centímetro de su suelo o subsuelo ni de sus recursos naturales como acostumbran hacer los gobiernos neoliberales. Sujetará al inversionista a la legislación laboral cubana y protegerá expresamente al trabajador, que recibirá en todos los casos un salario por encima del mínimo. Protegerá al ecosistema: las inversiones deben recibir la luz verde del Sigue leyendo