Iroel Sánchez
Manuel Araya, quien fuera chofer, mensajero y encargado de seguridad de Pablo Neruda, lleva años denunciando que el poeta no murió de cáncer, como se ha tenido por cierto hasta ahora, sino que fue asesinado por el régimen de Augusto Pinochet. El 26 de julio de 2004, Araya le contó su testimonio al diario El Líder, del puerto chileno de San Antonio, donde reside, pero su historia no trascendió hasta la pasada semana cuando el semanario mexicano Proceso publicó una entrevista con los detalles de la acusación. Sigue leyendo