«…repiten un lugar común extendido en los medios hegemónicos que intenta proyectar esa imagen de buenos periodistas, objetivos y serios por un lado, y periodistas militantes por el otro. Los primeros son los que trabajan y repiten apoyando las «verdades» de los medios de la derecha; los otros, los que empiezan a ser proscriptos, son quienes no solo no repiten el discurso del mercado, sino que lo combaten. Los serios y objetivos son los que apoyan la crítica despiadada y permanente a los gobiernos progresistas en todo el mundo, los que viven admirando las políticas de los países centrales y propalan los postulados de la patria financiera y, a la vez, critican con saña cualquier demostración de soberanía. Sigue leyendo →