Ángel Guerra Cabrera
El cese del fuego conseguido en el sureste de Ucrania el 5 de septiembre constituye otra derrota de los intentos estadunidenses de usar ese Estado como ariete contra Rusia y saquear sus riquezas. Anteriormente, el golpe de Estado de Maidán facilitó la brillante jugada geopolítica del presidente ruso Vladimir Putin que permitió la reintegración de la península de Crimea a Rusia Sigue leyendo